jueves, 13 de agosto de 2009


TEIS, MI CEMENTERIO

Cuando voy a Teis, al cementerio
Al subir las gastada escalinatas
Veo, allí dentro
Una capilla abierta
Alrededor los muertos
En el centro está
El que todo lo escucha
Ordenando silencio
Veo las almas pasar
Ocupando su asiento

“Estamos aquí reunidos,
-Me dicen los muertos-
Para celebrar la llegada de otro cuerpo
Su tumba llena de flores
El primer día de entierro
Para semanas más tarde
Ser su sepulcro un desierto”

“¡Silencio!¡Callaos!
-Escucho a los muertos-
Ya están viniendo,
Son los familiares
Que desean vernos
Muchos arrepentidos
Por lo que no hicieron
Cuando en otra vida
Hacerlo pudieron”

“No saben los pobres
Que aquí donde estamos
Ni odios, ni envidias, ni deseos vanos
Con paciencia a todos
Aquí esperamos”

II
Cuando voy a Teis, al cementerio
Contemplo los seres queridos
Que llevo dentro
Mamá, papá, la nena
Por este orden
Los tres han muerto

Y cuando les pregunto
Que queda de ellos
Con la brisa suave
Me responde el eco
“No es como tu piensas, los recuerdos
En esta vida solo quedan los hechos”

De los cuatro que éramos
Solo yo quedo
Y como un soplo el tiempo
Me lleva a ellos
La casa transformada
Que era su sueño
Espero que les guste
Si la están viendo
Y cuando les pregunto
Con el céfiro errante
Me responden ellos
“Esos son hechos…
Esos son hechos…”

Dime, mamá, ¿que fue de tu dulzura, tu comprensión
Aquel amor tan tierno?
“En esta vida, hijo solo quedan los hechos”
Dime, papá, ¿Qué fue de tu vigor, tu fortaleza
La seguridad que llevabas dentro?
“En esta vida, hijo solo quedan los hechos”
Dime, hermana:¿Qué fue de tus ansias, de tus deseos
De aquellos bordados perfectos?
“Poco, hermano, poco queda de mi tiempo”

Al contemplarlos a todos, allí dentro
Elevo la vista al cielo
¡Oh, Dios, que sólo
Me estoy sintiendo!

III
Cuando voy a Teis, al cementerio
En sepulcral silencio
Me estremecen las emociones
Que estoy sintiendo
Allí mis familiares
Que vivieron mi tiempo
Mis tíos, mis tías, mis abuelos
Todos han muerto

Y cuando les pregunto
Que queda de ellos
Con la brisa suave
Me responde el eco
“Los bienes que teníamos
Cambiaron de dueño
De nosotros quedan
Tan solo recuerdos”

IV
Cuando voy a Teis, al cementerio
En las heladas tumbas
Barridas por el viento
Veo tantos conocidos míos
Que poco a poco el tiempo
Ha ido sepultando
En aquel gran templo
Que entonces pregunto
Para mis adentros
¿Por qué se fueron ellos?
Y con la brisa suave
Me responde el eco

“Disfruta mientras puedas
Goza de tus momentos
Que pronto entre nosotros
Encontrarás un hueco”

Al contemplarlos a todos
Allí dentro
Elevo la vista al cielo
¡Oh, Dios, que viejo
Me estoy sintiendo!

Nuestras vidas están destinas
A permanecer sepultadas
En el olvido del tiempo infinito

No hay comentarios:

Publicar un comentario