EL DESCANSO

Cual ave migratoria,
Que otea el temporal
Arriesgando su vida,
Ante la Ley Natural
He volado hacia el Sur,
En busca de otro lugar,
Dónde calentar los huesos,
Después de tanta humedad
Aquí en el Sur de Tenerife
Contemplando el ancho mar
Que rompe contra la costa
Con rotunda brusquedad
Buena comida, limpia piscina,
Refrescos, meditar y soñar
¡Qué gratificante vida
Poder sin prisas contemplar,
Cómo se desliza el tiempo,
Cómo los blancos corceles,
Sobre las olas caminan!
El cielo lleno de luz,
A la espalda las montañas,
Que protegen el lugar,
Y bajando la ladera,
En la costa el ancho mar
¡Qué bella Tierra tenemos!
¡Qué patrimonio para cuidar!
¡Todos lugares tienen encanto
Si los sabemos apreciar!
CENEME- 8-03.09