REFLEXIÓN PARA LA OCTAVA SEMANA.- Leer mañana, tarde y noche
PRINCIPIO NÚMERO OCHO
Hoy multiplicaré mi valor un ciento por cien
Hoy haré metas para hoy y para todos los días de mi vida
Hoy empezaré el día doblando las visitas que hice ayer
Hoy realizaré al menos una tarea más que ayer
Hoy alejaré de mi mente el miedo al fracaso o al rechazo
Hoy sabré que mañana puedo mejorar el hoy

Si un trozo de patata que plantas, produce diez patatas, si un grano de maíz, produce diez espigas y un grano de trigo cien espigas, ¿por qué yo no puedo hacer lo mismo? Hoy produciré más que la patata, el grano de maíz o el de trigo. Hoy haré metas para hoy y para todos los días de mi vida. Todos los días al terminar la jornada, antes de ir a la cama, escribiré los objetivos del día siguiente y tan pronto despierte los leeré e inmediatamente comenzaré por el primero. Ya que ningún mapa por bien trazado que esté, te moverá un metro si no empiezas a caminar por él. “La acción habla más alto que las palabras”. Hoy seré acción desde el primer momento y no hay nada que pueda detenerme hasta alcanzar mi meta.