Cuando lea la
desgracia en los ojos de los hombres
Y me sienta por todos
despreciado
Si con mis gritos al
cielo he molestado
Si maldigo mi destino
entre los pobres
Deseando ser alguien
más rico en esperanza
Parecido a él, como
el que tiene amigos
Olvidando los que se
declaran mis enemigos
Buscando hallar el
arte para inspirar la confianza
Sin embargo en estos
pensamientos desesperado
Al pensar en ti me
siento de nuevo animado
Soy como la
alondra que al levantarse el día
Canta himnos a las puertas
de un cielo alborozado
Pues tu dulce amor en
riqueza ha transformado
Mi desesperación,
pobreza y melancolía
Miguel
Correa-15-04-2013
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