Por mi amor regatea
y pelea con la fortuna
Esa diosa culpable de
mis pérfidas acciones
Que no me
proporcionaron una vida sin traiciones
En los medios
públicos me ahogué en esa laguna
Ocurre entonces que
mi nombre queda marcado
Y desde entonces mi
naturaleza queda sometida
Es la mano del
tintorero ante una prenda teñida
Compadécete de mí que
quisiera rectificar el pasado
Ya que como un
obediente paciente, beberé
Venenos amargos
contra mi fuerte infección
Toda amargura que
amargura piense, probaré
Ni doble penitencia,
para corregir lo incorrecto
Ten lástima de mi,
querido amigo, y yo te aseguro
Que tu consejo
siempre me ha parecido perfecto
Miguel
Correa-7-11-2012
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