domingo, 30 de marzo de 2014

LA INCINERACIÓN



LA INCINERACIÓN

Ya no hay sitio para los difuntos en el cementerio
Somos demasiados en este hermoso mundo
El crematorio nos borra del mapa en un segundo
¿Sufrirán al quemarse los difuntos? Otro misterio

Ya no habrá flores que poner sobre sus tumbas
Ni lápidas que limpiar los fines de semana
Ni familiares que les visiten cuando les dé la gana
Ni Cristo que poner, ni velas que encender, si les alumbras

Y cuando Octubre sople, entre los viejos robles
Su viento melancólico no barrerá sus tumbas
Ni la luz del sol alumbrará sus rostros nobles

Los pobres muertos, con sus grandes males
Su polvo esparcido por las arenas del mundo
Deben encontrar muy ingratos a los mortales



2 comentarios:

  1. No es nueva la incineración,
    que ya en el Neolítico,
    a orillas del Mediterráneo,
    practicaban la cremación
    Fue esta común para los grecorromanos
    hasta que llegaron los cristianos
    para abolir estos rituales paganos
    En un tiempo más cercano
    algunas iglesias protestantes la aceptaron
    pues era su parecer
    que para resucitar a un difunto
    Dios en su poder,
    tan fácilmente lo hace
    del polvo como de las cenizas
    Hoy algun+s, más coquetos, la cremación prefieren
    a una lenta descomposición
    que además les permite en el viento viajar,
    reposar en su lugar preferido,
    o por las ondas del mar dejarse arrastrar
    Para que esperar que vengan a visitarte,
    o que pongan velas para iluminarte
    y decoren tu último lugar sin quererte consultar,
    si al fin eres libre

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    1. Gracias David, por tu versión histórica, yo solo estoy haciendo ver el realismo que estamos viviendo y hacia donde nos conduce, que pienso es claro, el olvido más rapidamente, en el tiempo infinito. Saludos

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