LA PRIMERA VEZ
Quería sentir sus
brazos entorno a ella
Y su duro y joven
cuerpo apretado al suyo
Miraba sus anchos
hombros, su pelo negro
Miraba sus ojos
verdes, su sonrisa bella
Ella lo condujo al
escondrijo de la playa
Su aliento era
caliente y agradable
Sus labios
temblorosos y culpables
Quería sentirse para
siempre suya
Recorrió con sus
manos sus caderas
Su cintura un vaso de
porcelana
Ella se apretó a él
con toda gana
Ella gimió con
caricias verdaderas
Él rompió el beso
para besar sus hombros
Sensación deliciosa
que sintió en sus senos
Su boca la chupaba
como un niño tierno
Ella sintió en su
cuerpo la dureza de su miembro
Él estaba nervioso,
era un inexperto
Ella abrió sus
piernas para llevarlo a puerto
Sus vientres se
juntaron en brutal encuentro
Sus cabellos sueltos
cabalgando al viento
Sabía que había
llegado a su límite
Ella se arqueaba más
alto, más rápido
No sentía la tierra,
más allá del cielo
Sintió la explosión y
su líquido caliente
Dos seres soldados,
una identidad
Sus voces un simple y
jubiloso grito
Después con ella
dentro en su oído dijo
“Quiero estar así
contigo hasta la eternidad”
El sexo es el duende que sirve al amor
Miguel
Corea-13-01-2013
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