Otra vez he pasado por SAMIL y otra vez fui asaltado por la algarabía de los

“NIÑOS EN LAS PISCINAS DE SAMIL”

Chapoteaban en el agua los enanos 

Como gaviotas retozando en un estanque

Su júbilo y sus risas regalaban

A los que pasábamos por allí delante

Y sentí felicidad al contemplarlos

Alegres, dichosos, inconscientes

Imaginé un paraíso, solo niños

Sin maldad, sin odios, diferente

Un jardín de risas y de juegos

Borrachos de salud ver en sus frentes

Vivir el momento divertidos

Sin tener planes urgentes

¡Ser niños, siempre niños!

¡No querer llegar a adolescentes!

CENEME-25/05/2019